lunes, 27 de febrero de 2012

PORTEÑOS QUERIBLES
Giovanni Anconetani  y la primera fábrica de acordeones de América 

Anconetani llegó desde su Loreto natal (Italia) en el año 1892, y luego de varias idas y vueltas, decidió radicarse en la Argentina.
A principios del siglo XX, fundó la primera y única fábrica de acordeones de Sudamérica.
El final de la década del ‘30 y el principio de los años ‘40 fue indudablemente la época de oro de la familia italiana que, además de trascender como fabricantes, se codearon con D’Arienzo y Troilo.

Hoy, a los Anconetani, elaborar un acordeón les lleva un promedio de dos años de labor, ellos efectúan todo a mano, son artesanos que trabajan la madera con limas y mechas.
Crearon distintos modelos en todas las épocas, instrumentos que han sido aceptados por los grandes acordeonistas. Desde los clásicos, tropicales o chamameceros, los Anconetani aún hoy siguen al servicio y a las necesidades de todos los acordeonistas. MDB



lunes, 27 de febrero de 2012

PORTEÑOS QUERIBLES
Giovanni Anconetani  y la primera fábrica de acordeones de América 

Anconetani llegó desde su Loreto natal (Italia) en el año 1892, y luego de varias idas y vueltas, decidió radicarse en la Argentina.
A principios del siglo XX, fundó la primera y única fábrica de acordeones de Sudamérica.
El final de la década del ‘30 y el principio de los años ‘40 fue indudablemente la época de oro de la familia italiana que, además de trascender como fabricantes, se codearon con D’Arienzo y Troilo.

Hoy, a los Anconetani, elaborar un acordeón les lleva un promedio de dos años de labor, ellos efectúan todo a mano, son artesanos que trabajan la madera con limas y mechas.
Crearon distintos modelos en todas las épocas, instrumentos que han sido aceptados por los grandes acordeonistas. Desde los clásicos, tropicales o chamameceros, los Anconetani aún hoy siguen al servicio y a las necesidades de todos los acordeonistas. MDB