jueves, 13 de junio de 2013

QUE CHIFLETE!

Estufas a kerosene, hornallas, estufas eléctricas, tiros balanceados, A/C frío calor, losa radiante, paneles... distintos son los implementos que utilizamos actualmente los porteños para cuando hace frío.
Pero, ¿que se utilizaba allá por el 1800 para mantenerse algo calentito en el piso de tierra?
Una respuesta a ello nos la brinda el inglés Beaumont en su paso por nuestra ciudad allá por 1826-1827:

"...Pocas casas están provistas de hogares y chimeneas en Buenos Aires; por cierto, ninguna sino aquellas que han sido construidas en los últimos tiempos por los ingleses, y unas pocas incorporadas por los nativos a imitación de ellos...

"...La falta de chimeneas y ventilación en sus cuartos, los hace terriblemente húmedas y frías. Esto es corregido, insuficientemente por el uso del brasero, que consiste en un elemento de bronce de unas doce pulgadas (aproximadamente 30 cm.) de diámetro, ubicada en un marco de madera, unas seis pulgadas (aproximadamente 15 cm.) elevado del suelo.
Este cuenco es llenado con brasas de madera del fuego de la cocina, transmite un calor mediano al residente que está encimado sobre él, pero no es un calor genial; el gas anhídrido carbónico y otras emanaciones, que se desprenden producen desvanecimientos, vértigos y a veces apoplejía; y produce inflamaciones de los pulmones y tuberculosis frecuentemente fatales..." *

Tomando en cuenta esta cita, tener en cuenta siempre el viejo consejo: "nunca dejes tu casa cerrada con algún artefacto encendido para calentar el ambiente y siempre tené alguna mínima ventilación en el ambiente a fin de evitar el CO2"

*Fuente: J. Beaumont, Viajes por Buenos Aires, Entre Ríos y la Banda Oriental (1826-1827), Buenos Aires, Solar-Hachette, 1957

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jueves, 13 de junio de 2013

QUE CHIFLETE!

Estufas a kerosene, hornallas, estufas eléctricas, tiros balanceados, A/C frío calor, losa radiante, paneles... distintos son los implementos que utilizamos actualmente los porteños para cuando hace frío.
Pero, ¿que se utilizaba allá por el 1800 para mantenerse algo calentito en el piso de tierra?
Una respuesta a ello nos la brinda el inglés Beaumont en su paso por nuestra ciudad allá por 1826-1827:

"...Pocas casas están provistas de hogares y chimeneas en Buenos Aires; por cierto, ninguna sino aquellas que han sido construidas en los últimos tiempos por los ingleses, y unas pocas incorporadas por los nativos a imitación de ellos...

"...La falta de chimeneas y ventilación en sus cuartos, los hace terriblemente húmedas y frías. Esto es corregido, insuficientemente por el uso del brasero, que consiste en un elemento de bronce de unas doce pulgadas (aproximadamente 30 cm.) de diámetro, ubicada en un marco de madera, unas seis pulgadas (aproximadamente 15 cm.) elevado del suelo.
Este cuenco es llenado con brasas de madera del fuego de la cocina, transmite un calor mediano al residente que está encimado sobre él, pero no es un calor genial; el gas anhídrido carbónico y otras emanaciones, que se desprenden producen desvanecimientos, vértigos y a veces apoplejía; y produce inflamaciones de los pulmones y tuberculosis frecuentemente fatales..." *

Tomando en cuenta esta cita, tener en cuenta siempre el viejo consejo: "nunca dejes tu casa cerrada con algún artefacto encendido para calentar el ambiente y siempre tené alguna mínima ventilación en el ambiente a fin de evitar el CO2"

*Fuente: J. Beaumont, Viajes por Buenos Aires, Entre Ríos y la Banda Oriental (1826-1827), Buenos Aires, Solar-Hachette, 1957

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